enero 14, 2013

Lo que Dios soñó que fueras

Saludos a todos los lectores del blog! luego de tanto tiempo de no poder estar por acá (por cuestiones de estudio) vengo a compartir con todos ustedes una pequeña reflexión llamada "lo que Dios soñó que fueras", lo comparto de una agenda que tengo y espero que al igual que mi la puedan disfrutar, ya que está demasiado buena! Que Dios les continúe bendiciendo!

Cuando un artesano produce una herramienta la hace teniendo en mente funciones específicas en las que va a ser utilizada. Un cuchillo para cortar, un lápiz para escribir, una lámpara para iluminar. Suena bastante obvio pero no siempre es así en nuestra vida.

En el momento que Dios nos hizo nos dio una mezcla de dones, teniendo en mente funciones específicas para el beneficio de los que están a nuestro alrededor. Al darte esos dones y talentos, Dios no podía evitar de emocionarse al pensar en las bellas y grandes cosas que harás cuando aplicaras todos estos recursos que se estaban colocando en tu vida. Dios soñaba en ti, en tus logros y en cuánto lo disfrutarías.

A unos les dio creatividad para hacer cosas que inspiran, y a otros les dio la facilidad en contabilidad, para que los creativos hagan sus proyectos. Esto es precisamente lo que dice 1 Corintios 12: 7 "Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho."

Muchas veces nos sentimos frustrados con nuestra vida y en el lugar donde estamos, tal como una pieza de un rompecabezas forzada en el lugar que no le corresponde. Pueden haber muchas explicaciones para este sentimiento, pero tal vez es que eres un cuchillo que está tratando de recoger la sopa, o una lámpara que usan para hacer café. De ahí el sentimiento de frustración, no estamos en el lugar diseñado para nosotros.

Te animo a que mires muy dentro de ti y trates de ver las intenciones de Dios detrás de tus talentos, habilidades o cualquier cosa que se te hace fácil. Puede ser simplemente una agilidad para hacer sentir bien a  las personas. Pueden ser cosas sencillas pero no menos importantes. Un cuchillo solo puede cortar, pero, ¿te imaginas una cocina sin un solo cuchillo? Así que no busques una respuesta a lejana ¡cuando está al frente de tu nariz! Solo acepta con gratitud quién eres, buscando vivir como lo que Dios soñaba que fueras cuando te hizo.

Aquí hay unos ejemplos bíblicos de habilidades que Dios ha puesto: hospitalidad (1 Pedro 4: 9-10), música (Salmos 150), administración (Génesis 41: 39-48), servicio (2 Timoteo 1: 15-18), misericordia (Lucas 10: 30-37), creatividad (Éxodo 31: 3), entre muchos otros más.

Háblale a Dios en oración y dile constantemente que deseas ser todo lo que Él soñó que fueras y, aunque no libre de problemas, tu vida se sentirá más plena, como esa piedrecita del rompecabezas en su propio lugar.